lunes, 20 de enero de 2025

MONOTONE MURK - "WITHERING OF REALITY´S PRESENCE" (OMINOUS SOUNDS; 2024)

Me complace traeros hoy la reseña de la segunda edición del naciente sello OMINOUS SOUNDS dedicado al Dark Ambient, el Ritual y sonidos aledaños. Tras el excelente recopilatorio Rituals from Ancient Europe (podéis pinchar en el enlace para leer la reseña), sale este fabuloso Withering of Reality´s Presence de MONOTONE MURK de Malta, álbum que viene a confirmar las buenas sensaciones que me produjo el tema "Manifestations" del citado recopilatorio. Proyecto formado en 2020 y centrado en un Drone Ambient de corte ritual profundamente influenciado por cosas como AGHAST (ya lo pone el texto interior donde se dedica el último corte a Andrea Haugen Nebelhexë) y soporte tradicionalista como la `Sophia Perennis´ de Guenon o el controvertidísimo Evola en su andamiaje contextual / inspiracional. Como lecturas complementarias también recomendaría a Aldous Huxley en su La Filosofía Perenne, Ananda Coomaraswamy o Fritjof Schuon.

La edición en digipack (50 copias) no especifica el artwork pero me parece Inteligencia Artificial, cosa en la que no entro que ya peino demasiadas canas. Compuesto a modo de viaje sensorial a través del decaimiento del mundo moderno, y haciendo enroque espiritual con la inexorable decadencia corporal, abre "Transvering Sensory Desert" en un tono de Dark Ambient bastante sosegado pero nunca estancado que se disfruta mucho más a volúmenes altos y con auriculares. Suerte de iniciático viaje hacia en interior de la psique, pérfida traspolación de lo material a lo psicológica en una cópula sagrada con la membrana hematoencefálica, son 9 minutos envolventes en los que se hace especial hincapié en una atmósfera aterradoramente cósmica que por supuesto bebe de lo cinematográfico.

Sin perder nunca ese tono apocalíptico que lo imprima todo, "Beyond Sombre Conduits" usa elementos distintivos de corte ritual como acampanadas percusiones, partes de instrumentos de cuerdas procesadas / loopeadas con una angularidad Pendereckiana y una pátina orgánica que lo recubre todo como detritus (sin llegar al Harsh Noise, pero sí como herrumbre férrea flotante) en una lluvia postnuclear. Cuando uno intenta pensar en imágenes que se deriven de lo sonoro, piensa en las pinturas de un Caravaggio que hubiera nacido en el año 2055 y estuviese haciendo arte contemporáneo basado en la Divina Comedia... y es que en conjunto la aleación alquímica entre sonidos Industriales y Clásicos está muy bien conseguida hasta el punto de que vuelvo a citar (lo hice en la reseña de Rituals From Ancient Europe) a John Watermann y su Calcutta Gas Chamber o evidentemente Aghast). Me encanta cómo se disuelve el tema con abotargadas, espaciadas percusiones de tambor y un clímax absolutamente desolador.

"Doctrine of the Four Ages" tiene algo de Dungeon Synth, o al menos su epicidad es manifiesta. Conceptualmente no lo sé, pero imagino que la inspiración hinduísta / védica está ahí con la contraposición entre el Kali Yuga y el Satya Yuga... y por supuesto, no me meto en temas ideológicos tradicionalistas o perennianos (que los controlo porque leo, y el que lee sabe) porque no es mi misión ni interés. Me centro en lo cultural, la música y el arte que mientras sea respetuoso, tendrá cabida aquí. Ayuda muchísmo a la atmósfera el homiliesco sampler vocal (no logro identificar de quién es) que cambia de tono en "Mirrors and Nooses", sutil pero efectiva muestra de cómo esta música podría perfectamente encajar en un juego tipo Survival Horror como mi amado Silent Hill. Lo mejor del buen Dark Ambient es que si lo escuchas sin apresurarte, los cambios de ritmo surgen un efecto mucho mayor como es el caso de esa melodía pseudo Synth que se repite monolíticamente en la retaguardia.

Sigue el bloque compacto de "Ennui I" y "Ennui II" donde se aboga por un tono mucho más melódico en una suerte de nana estelar para mecer estrellas muertas o nonatas y es que me digo, ¿puede una estrella nacer muerta?. No es descabellado citar a la Kosmische más oscurantista, a Schulze y a otros eternautas pero bueno, imagino que todo dependerá de la longitud de onda de los hímenes timpánicos del respetable oyente. Mención especial para la melodía infantil, circense y casi de caja de música y su excelente deformación, elongación y contracción del tempo sobre notas sutiles de piano. "Flesh Departure", como dije más arriba dedicada a Andrea Haugen Nebelhexë, cierra el ourobórico ciclo vital con un anti clímax de exquisito Drone con ecos cósmicos que te lleva sin prisa en un viaje hacia atrás de desintegración cárnica a través del fuego hasta que te ves abocado a ese esfínter iniciático que une la individualidad del yo con el Cordón Umbilical de la primera esencia, aliento o Atman.

Muy recomendado para los amantes de estos estilos.

https://ominousounds.bandcamp.com/album/withering-of-realitys-presence

martes, 14 de enero de 2025

JAVIER ARNAL - "AWFF ALMERÍA WESTERN FILM FESTIVAL ORIGINAL SOUNDTRACK" (DIGIPACK, 2024)

Me enteré de la existencia de esta banda sonora del AWFF (Almería Western Film Festival) en un bar de Saigón al que fui a parar tontamente. Me quedé dormido en el puto desierto de Almería y como resulta que las dunas se mueven, y el tiempo ya no es lo que era y va a su arbitrio, pues con dos narices llegué a Saigón no me pregunten cómo. La cosa es que me enteré porque en Vietnam son muy amantes de la música de Javier Arnal (su lúbrica y gonadal mirada entrecerrada que les recuerda a sus ancestros); y bueno, entre una vaporosa nube de almizcle y fijando la vista, di a parar con un altarcito donde se veneraban allí juntitos Canciones Defectuosas (2016), Tus Besos (2018), El Impostor (2023) y The Liars (2021) y un Cd (bueno, eran dos pero esa es otra historia) que me pillaba por sorpresa.... esta banda sonora del Almería Western Film Festival imagino que de su última 14ª edición (de un sitio llamado Tabernas no puedes esperarte nada malo, evidentemente).

De Saigón me vine pronto y en Bus, que no tenía la Duna de vuelta pasaba a deshoras y bueno, a lo que voy, 40 arenosos minutos que se graban y mezclan en La Casita Rosa Estudio por el propio Javier, para luego masterizarse en los Sudblock Studios, usar fotos de Sergio Lucas y maquetar Marco Roca. Resulta fascinante cómo "Walking Under the Fire of Sun" (Sintonía Original) y su bandurrial deje de cuerdas, su repetitivo y ominoso cuadro melódico y sus cánticos melosos me traen a la cabeza una versión pornográfica de Ringo... y es que ostias, no siempre tiene uno que andar disparando balas. A partir de aquí se suceden pequeñas piezas / scores muy interesantes como el Country crepuscular de "Barro", algo así como una instrumental bastarda de 16 Horsepower. Me encanta la afinación lejana y casi `espacial´ de la guitarra. También me resulta curioso cómo las bandas sonoras de Western acaban enrocándose a la perfección con el Surf, pero eso sería para un ponzoñoso artículo de psicología Junguiana que no estoy dispuesto a realizar.

"Polvo" es muestra de lo que he dicho más arriba. Arrastrada y pérfida, recuerda a Javier Colis en determinados momentos en los ataques con eco de la eléctrica que se acompasa dúctilmente con la acústica. Los pequeños toques sinfónicos por lo visto son de algo que desenterraron sin querer el pellejo seco de Elmer Bernstein (o sería Goldsmith?) creyendo que era otra cosa, y como ya se sabe que con agua todo se recupera un rato, pues allí dio el tío sus últimas 3 clases magistrales. Sigue la magnífica "Walking Under the Fire of Sun" (Versión Mexicana) con el gran Javier mascando las letras como si fuera tabaco... ruido de cadenas y una epicidad a flor de piel. Y como el tío encima es elegante, se traga el tabaco mascado y silba. Cánticos indios y arpas, acordeón, violín y banjo en "El Cruce" es el punto exacto donde se cruzan Wovenhand con Guido y Maurizio De Angelis.

Muy estilizada "Cuervos" con algo de Los Chatarreros, de Colis, de toda esa amalgama de implocóctel ruidista de nuestros primeros (algo antes) 90 pero de Despeñaperros para abajo con una ominosa armónica in crescendo sobre la que se yergue el pétreo Spoken Word decadentista de Arnal (`waiting for another corpse´). Una tras otra como tiros caen "Walking", la evanescente coda para crujido de mecedora y silbido leporino para crescendo ruidoso "El Fin", la amenazante y Chatarrera "Tierra" o la bonachonamente campestre y cuasi experimental "Aire", temas que se van sucediendo con un nivel altísimo de composición que hace a este álbum algo más que una simple BSO de un Festival... y es que AWFF tiene la suficiente impronta y empaque para funcionar como un ultracohesionado disco de Rock Desértico (añada usted la etiqueta). La cosa es que cuentan que en Tabernas, debajo de las piedras no hay alacranes sino Arnalcranes, una especie que surgió tras una cópula entre... bueno, no es fiable el dato... la cosa es que hay otros Hijos de Puta, pero están todos dentro de Este.

Suenan caballos y una guitarra española acortijada te sierra el alma con esa clara calma antes de la "Dinamita". Ritmos latinos, palmas y sacar en procesión la espina dorsal de Xavier Cugat para tirarla luego a una cuneta (forajidos!). Anochece en el circo y todo se vuelve espectral.... chicharra y banjo sobre drone, combinación perfecta para que vaya haciendo efecto el mezcal. "Adiós" es un minuto y pico que es lo que deberías en tardar en pillarte una copia:

https://javierarnal.bandcamp.com/album/awff-original-soundtrack


jueves, 9 de enero de 2025

MINSK - "THE RITUAL FIRES OF ABANDONMENT" (CONSOULING SOUNDS; SOUL0200, 2024)


`In my darkest hour my blood runs free
I’ve come to lie on the fire
I’ve come to stare at the sun
Where two bleed as one´

The Ritual Fires of Abandonment es el segundo de los cuatro largos de los americanos MINSK, editado en 2007 y uno de sus discos más laureados que inicialmente saliera por Relapse Records pero que tras años descatalogado los insignes belgas de CONSOULING SOUNDS vuelven a traerlo de vuelta en todo su esplendor (doble lp con varios colores y el precioso digipack de toda la vida). Hablar de MINSK es complejo ya no sólo por sus diversos cambios de formación, como por su críptica y hermética tableta de sonidos y texturas. En este disco, los de Chicago eran Christopher Bennett, Timothy Mead, Sanford Parker y Tony Wyioming con diversas colaboraciones que detallaré más adelante.

En el apartado técnico, el disco se produce, graba y mezcla por Sandford Parker en los Volume Recording de Chicago para posterior masterización de Collin Jordan (The Boiler Room). Cuenta además con letras basadas en escritos de Khalil Gibran y finalmente artwork y layout se van para Orion Landay y Anthony Couri respectivamente. En cuanto a sonido, se mueven en una suerte de cruce entre el tribalismo triposo de los últimos Swans, los abigarrados riffs de guitarra de cosas como Pelican, Isis, Cult of Luna y demás pero para mi gusto mucho más oscuro y enraizado en un Avantgarde que les lleva a retorcer (sobre todo a nivel percusivo) patrones que en principio pudieran recordar a Neurosis, Uffomamut, Yob o Unearthly Trance pero que afortunadamente poco a poco va adquiriendo su propia personalidad única e intransferible, posiblemente por esa manera de aunar Sludge, Hardcore, Doom, Psicodelia con partes Ambient y Tribales.


`The voice cannot carry
The tongue and the lips that give it wings
For even as love crowns you
So shall it crucify you
Descend to your roots
And shake them from their clinging to the earth
We shall be together
When the white wings of death
Scatter our days´

A pesar de haber pasado 18 años desde que se publicó, su oscurísima lisergia alquitranada, las incursiones en atonales abismos ultra poliédricos y la absoluta barrabasada de Parker a la voz eleva a The Ritual Fires of Abandonment a esas marmóleas antesalas del Olimpo. Abre el disco la descomunal (casi 15 minutos) "Embers"; un patrón percusivo `hacia atrás´ y cascabeles crean una pátina tipo Dead Can Dance en su Spiritchaser (1994). Hace acto de presencia un hipnótico bajo y psicotrópicos toques de sintes en lo que es una apertura de gran empaque épico. Las voces, casi un cántico susurrado y donde colabora Gladys Couri, remiten a bandas de Prog setentero, cosa curiosa porque la mala baba que se va acentuando tipo Neurosis (quizás tipo A Sun that Never Sets, 2001) casa a la perfección con lo anterior y cuando uno se da cuenta han pasado cinco minutos como un suspiro y el corte estalla en todo su esplendor Sludge Doom machachón, cósmico y estilizado. El arreón final, puro Uffomammut / Unearthly Trance en toda su gloria y epitafio de piano y sintetizador. 

Siguen dos cortes muy interesantes. "White Wings", con un trabajo alucinante de los teclados y efectos tipo eco dentro de un tema eminentemente paquidérmico de esos que invitan al despiece. Arreones de guitarras apelmazadas que recuerdan a Boris / Neurosis o incluso a los High on Fire. Pseudo monásticos cantos casan a la perfección con el registro limpio de Parker a las voces, hasta que entra la instrumental "Mescaline Sunrise" para alborotar todos los neurotransmisores posibles... Ambient desértico y crepuscular, líneas de guitarras meditabundas y espaciadas y en suma, algo así como los Yawning Man apurando los últimos trozos de peyote mientras se apagan las llamas de la hoguera en un desierto ignoto. Sin solución de continuidad, todo da paso a la monolítica "The Orphans of Piety", quizás algo más enclavada dentro del Doom Avantgarde en sus primeros y sinuosos compases, y luego tirando de esa vertiende del Occult espacial tipo NAAM, ANCESTORS y otros grandes olvidados del panorama musical. Desde aquí toda una alucinógena sábana de bases rítmicas, cánticos que recuerdan muy mucho a Swans hasta que todo desemboca en la aterciopelada línea de saxo de Bruce Lamont que nos mete de lleno en el oscurantismo submundo del DoomJazz.


`There is a season a time to die
And the word games end as the clock thunders by and the rain sears this pain
As my streams keep running dry´

"Circle of Ashes" es instrumental salvo por voces sampleadas. Una preparación ritual para que el oyente salga vivo de la descomunal y plúmbea "Ceremony Ek Stasis", nutrida por colaboraciones de saxo (Bruce Lamont), voces de  Gladys Coury y Taryn Parker.... inicio casi de Space Rock pastoral a un pasito de la Kosmische hasta que entra la base rítmica. Los elementos electrónicos y de teclados pasan a un plano más cercano (casi que a primerísimo), se sube la intensidad y la negritud del Post Rock más Sludge se espesa en grumos cuasi cárnicos sobre los que van planeando voces limpias que me remiten a ese Neo Progresivo nórdico a lo Tusmorke, Arabs in Aspic y cosas así. Impresionante el nivel compositivo y lo fácil que hacen que parezca todo.... vaya manera de hacer que pasen los minutos como un suspiro, de alterar los estados de consciencia y no estancarse ni un sólo segundo. El saxo cuasi latino acoplado a percusiones casi brasileñas termina por sacarme de este planeta, para luego transformarse en agónicos extertores y finiquitar 60 minutos de auténtica locura.

Muy recomendado.


jueves, 2 de enero de 2025

BROKE LORD - " VISONE CHIARO" (AUTOEDICIÓN, 2024)

Por cuestiones imagino que pecunarias, la tremenda cuarta dosis de zumo de acetábulo onírico de BROKE LORD, titulada Visone Chiaro, había quedado metida en el cajón ostrácico (no existe la palabra pero ya se me entiende) en el que las grandes ideas sin financiar quedan metidas. Y era una pena porque la manera en la que el Folk Oscuro y el Post Punk lánguido (de ese que se mezcla con el Dub) de su debut, Death of a Flower de 2016 que me atreví a reseñar a pesar de que ya lo habían expresado a la perfección con aquello de `A circular post folk tale about inner chapels, lost grooms, the joy of martyrdom, desolated gardens and the second coming of Jesus under a female form. Broke Lord is Broke´. ¿Ha evolucionado BROKE LORD con los posteriores álbumes? Mi impresión es que no... o sí, a ver. 

Creo que la única diferencia estriba en unos cuantos grados en el sextante musical que usan y cuál sea la droga elegida. Si quieres algo duro y urbanita, pues le das al crack y te vistes de la Velvet Underground o de Suicide amaestrados previamente con escopolamina. Sin embargo, si te encuentras estiloso le das al canuto y te sale esos requiebros folkies que abundaban en Nazul Says (2018), quizás lo más cerca que han estado de unir el Folkopop pastoral Popol Vuhliano con el poetrodominatrix ambiente a lo Lydia Lunch. Siguiendo con las drogas, estaba claro que no podíamos eludir el tabaco, las capuchas que ya se saben que vienen impregnada de LSD y el alcohol... y ahí brilló incólume la gospeliana colonoscopia dentro de las tripas infectas de I Am the Phantom Limb (2019), disco que llevaba al límite las influencias de los trovadores crooners de chistes de gasolinera como Waits, Lanegan, Cohen, Dylan y tras alegres personalidades.

Y así llegó, como el hijo no deseado, Visone Chiaro que algo me da que se estaba cociendo a la par que el muy diferente y radical The Healing Wars Vol.1 de DIGITAL MOTHER. Dicho de otra manera, había nacido un niño bonito, y el hermano ya estaba adolescente y difícil de tratar. ¿Con quién te vuelcas? pues ya se sabe. La lástima es que Visone Chiaro era (y es) jodidamente bueno y como el tiempo es algo que fluye (no sé la dirección), me parece todo un acierto que Luis Boullosa haya decidido lanzarlo en edición `existente´ o que `existe´, que es como yo llamo a los discos porque parece ser que hay otra manera de llamarlos en las que no puedes tocarlos pero eso a mí me huele a tabú, pecado y soberbia. Y aprovecho para quedarme a gusto con esto: `oh, hemos sacado un vinilo y queremos que nos reseñes´, `bien, mándalo´.... `uy, no puedo, es vinilo y es limitado y es......... oiga, oiga? a colgado el teléfono, Coronel? (Y Coronel Piensa: sí, sois bienos, pero hay 2.000.000 de bandas out there y mi tiempo no es ORO, mi tiempo es de COBRE porque odio el oro, y ay de aquel que quiera hablarme de sus tesoros áureos)´. 

Bueno, que me voy por las ramas.

Visone Chiaro se graba / mezcla el 27 de Noviembre de 2022 por el psicodruida Raúl Pérez en La Mina (Sevilla), y con masterización de Cem Oral en los Jammin' Masters. La edición formato Digipack (fácil de mandar de promo, bonita, barata y biensonante) que respeta la estética monocromática anterior con una fotografía de portada y otra de contraportada (imagino que de Elvira Jardón). A la sazón, aquí la banda la forman (o deforman): Asier "Houston" Maiah y Juangui Acosta a las guitarras; Antonio "Young Gandalf" Moreno a la batería; Raúl Pérez con teclados, sintes y weird noise; Elvira Jardón a las voces en coro y Sir Luis Boullosa al monóculo eléctrico, bajo y voces. 

A nivel sonoro son los Broke Lord que conoces, pero con algunos ajustes en sus tornillos como ese deje rastafariano y Dub elegante que se mezcla con la calima desértica produciendo himnos tan destacables como la magistral "Shall I Come to Salisbury?", mitad Dub, mitad Post Punk de drogados hasta la bradicardia, brilla una obsesiva base rítmica cargada de groove y unos estribillos a dos voces entre un cada vez más laringectomizado Boullosa y la etérica Jardón. Mención a parte para los juegos de guitarra marcadísimos, circulares y esos riffs expedicionarios buscando la sobrecargada atmósfera que impriman los viejos Yawning Man cuando eran más primitivos que una púa de Sílex. 

Sigue el marcado ritmo del bajo arropando a una sincopada guitarra y unas voces creo que compartidas entre un procesado Luis, los coros que suenan a los acompañamientos de Leonard Cohen a cargo de Elvira y un `sea quien sea´ Prince Map. Resultado... pues un tema muy sorprendente y vocal, con una manera de vertebrar la melodía muy, pero que muy original y es que lo mismo se te vienen a la cabeza Television que una antigua grabación Roots Reggae y todo ello sin perder el aire `cuenta cuentos´ trágicos a la Inglesa (como las canciones para beber en tabernas pero con final necrótico). Muy interesante también cuando Boullosa se pone gótico el tío en la parte final del tema rozando la mezcla entre los Bauhaus y un Peter Steele un metro más bajo de lo habitual. Llevado a los extremos y conjugando el Dark Folk con un ultra triposo ritmo rastafariano, se desliza la deslumbrante "Mouse Work for Mouse (feat. Mauzzza)" con una línea muy buena de teclados en la lejanía al más puro trabajo alquímico de Scratch Perry y letras pulitzerianas: `When you unite Africa Back / Can I keep Madagascar / Mouse friend with the Penguins there / Penguins work for no Master´.

Vuelta a las campestres acequias del Folk Pop (daría para un artículo cómo Broke Lord han ido depurando el Neofolk en algo menos marcial y con más impronta crooner) en una brillante interpretación a las voces en "Moon is Everybody's Friend". Sencillo pero bello, contrasta con el tratamiento órfico de la steel guitar en el onírico inicio de "The Room Without Us", exudativa pieza catártica para sacarse espinas de amor teledirigidas que acaban matando... y rematando. Me encanta cómo se mete la tormenta de distorsión con una segunda guitarra en la retaguardia de manera muy sutil; como un mal pensamiento o un impulso destructivo autolimitado que acabara en coito (consentido, SIEMPRE). Y es que lo cósmico no siempre viene de fuera; a veces vomitamos estalactitas de semen estelar y efervescencias ovulares que demuestran que nuestro tubo digestivo alberga (para lo bueno y lo malo) todo lo necesario para una panspermia que llegue a buen puerto (Despeñaperros para abajo, luego hacia el cielo y más allá!).


Por interferencias neuronales se me vienen a la cabeza MANOWAR en versión NeoFolk cuando escucho los primeros segundos de "Dawn of Ballachulish (to the Goddess)", especialmente por el ímpetu en la seca percusión y la epicidad inmanente... pero pronto se me pasa y me meto de lleno en uno de los más embriagadores himnos epifánicos que recuerde, con su impronta escocesa (y por ende, a un pasito del Pagan Celtic Folk) ultrapegadiza, sus letras ancestrales (`They came against the winter wind / Their faces pale and cold / And left your image broken / Stranded in the mud /But I have seen you glowing / Upon their broken bones´) y sobre todo, su brillante mezcla entre lo acústico y lo eléctrico. Siguiendo, "Latin Sails", posiblemente el corte que más me recuerde a los inicios del proyecto; algo así como estar en un crucero de Vacaciones en el Mar en el que algo hubiera salido terriblemente mal (no sé, imaginado a una tripulación batrácica y a unos ángulos no euclidianos del bote), aunque si lo pienso bien, es a esa imaginería años 60 de Lana del Rey (ahora que me estoy poniendo en ello) a quien me recuerda las mini escenas cotidianas desgranadas a ritmo de trobador por Sir Boullosa. Incluso el atemporal estribillo me reafirma en todo esto: `A hundred miles into a dream / A hundred miles into a dream´.

Nos queda el último clavo con "Souls", guitarra acústica de Manu G. Sanz presente, es el tema más intimista con sus ecos a Dylan, Lou Reed, una versión menos apergaminada de Dylan y una profunda sensación de road movie (real o imaginaria) en carreteras labradas en un meteorito a la deriva... o a carreteras de alquitrán fundido por la calor residual de la bomba atómica de antes de ayer... o al desperezo post alcohólico y post coital en una vieja caravana de ruedas pinchadas en lo más profundo de Maine... o a llamadas lejanas desde cabinas telefónicas con personas que no quieren escucharte al otro lado.

Discazo.




miércoles, 18 de diciembre de 2024

DISENSEMBLE / EN FER - "SPLIT" (AUTOEDICIÓN, 2024)

Creedme cuando os digo que el orgasmo en el espacio exterior es distinto y es que eso de la gravedad cero es la clave. EN FER me dejaron pasmado con su debut Gros Rock (2023), y volvieron a demostrar su potencial en el reciente La Collision (2024) y como soy persona de adicciones, eyaculado una vez, eyaculado siempre y hoy os traigo el impagable, sucio, espacial, demente, lisérgico Split junto a los texanos Disensemble en lo que viene a ser una pedrada de punta hueca al tronco del encéfalo. La cassette (C45), limitada a 65 copias, es el equivalente a que te venga un meteorito con cresta punki de frente a velocidad de crucero espacial. Para colisiones, podéis consultar la reseña arriba.

Pues bien, la Cara A es para los de Montreal que aquí vuelven a ser Alex Pelchat, Michel Meunier, Charly Buss, Reüel Ordoñez y Martin Sasseville, grabando su parte en los Studio SYP (Enero-Febrero de 2024) para posteriormente masterizar Dominic Jasmin. Por supuesto, todo el tema de collage y diseño vuelven a recaer en Martin Sasseville. Abre la sucia, bordeando el Noise, "Le Futur ne Reviendra Pas" que por ciertos elementos en su sonido me trae a la mente a los míticos ST37 (reseñé por estos lares I´m Not Good del 2017 y "Over and Over and Over Again" de 2021. Pedaleras ultra saturadas de roña espacial, base rítmica rozando el monolitismo del Motorik, y una sensación de Impro Jam tetánica de riffs ultra apelmazados. 

El bajo, a pesar de todo el maremágnum que se monta, es perfectamente distinguible y se acompasa como un metrónomo con la batería creando una subcapa que sustenta todo el absoluto maelmstrom de efectos electrónicos, cacharrería industrial y eso que llaman Heavy Psych en estado puro. El toque punkarra acidótico de MC5, la insensatez fuzzera de unos acelerados Grand Funk Railroad, las líneas oscuras de Blue Cheer, el macarronismo de Hawkwind, la manera extrañísima y ácima de entender la psicodelia de grupos suecos como Dungen... y mucho, mucho sonido desértico a lo Yawning Man pasados de vueltas. Ojito a la pausa y cómo manejan la atmósfera en la más cromática y atonal "À Qui Sont Ces Cha​î​nes" donde el Noise sube enteros hasta casi llegar a una maraña Harsh. La cantidad abigarrada y barroca que suena en la retaguardia es casi indiscernible porque forma un todo amalgamado que te secciona la médula. Otra dosis brutal la de los canadienses.

La Cara B es para el power trío DISENSEMBLE (Austin, Texas) de la que dispongo de poca información salvo de que ésta es su primera grabación y se componen de Vanessa Gelvin (violin, effects), Matt LaComette (violin, effects) y Josh Ronsen (cello, effects)... impresionante. Tres instrumentos de cuerda (no sé si electrificados o a pelo y efectos electrónicos para los 15 minutazos de "The Irreversible Time of the Melancholy of the Demise of a World".... ¿y a qué suena? Pues imagina un cruce entre la AMM con Takehisa Kosugi, los trabajos electro acústicos de Xenakis y evidentemente los Taj Mahal Travellers... es decir, un abstracto Space Noise cargadísimo de elementos que alteran la temporoespacialidad de la música. Capas vibrátiles de un cello lunático sobre la que se elevan ululantes y procesados drones de violín hasta el punto de que es más fácil encasillar esto dentro de la Electro Acústica, el Dark Ambient o incluso el Avantgarde / Industrial. 

Por momentos roza la insania de Nurse with Wound merced a una total ruptura de esquemas preconcebidos. Los que hayan escuchado los comunales inicios de Amon Duul con durísimos experimentos cuasi amateur como Psychedelic Underground (1969), Collapsing Singvögel Rückwärts & Co. (1969) o Paradieswärts Düül (1971) pero evidentemente sin elementos rockeros. Es más, hay momentos en los que parece una vieja caja de música que se hubiera fusionado con una radio antigua teratogénica que estuviera mandando mensajes repetitivos `ad nauseam´ al mismo centro de la Galaxia. Para los que quieran algo visual, dejo un enlace a un concierto suyo en youtube. String Noise en estado puro.

Recomendadísima cinta y advertir que EN FER hacen unos atractivos bundles con los pedidos!.

https://ironapproved.bandcamp.com/

https://disensemble.com/


sábado, 14 de diciembre de 2024

HORTHODOX & HAIKU FUNERAL - "SERPENTINE SORCERY" (AESTHETIC DEATH ADCD 103; 2024)

Ya sabéis mi pasión por los sonidos que rastrea Stu Gregg con su insigne sello AESTHETIC DEATH y hoy toca traeros la reseña Serpentine Sorcery o lo que es lo mismo, la unión de dos de las bandas más crípticas, herméticas e iniciáticas que puedes echarte a los oídos. Por un lado tenemos a los rusos HORTHODOX que en conjunción con su alter ego paralelo GOATPSALM se marcaron ese oscurantista, parecido en espíritu quizás a lo que os traigo hoy, Ash (Aesthetic Death, 2022) que me dejó con la boca abierta. Del otro lado, nada más y nada menos que el dúo marsellés HAIKU FUNERAL que si mal no recuerdo, la última vez que os hablé de ellos fue con su abrasivo Drown Their Moons in Blood (Aesthetic Death, 2021). Ni que decir tiene que la discografía de los músicos implicados aquí se hunde hacia atrás en la noche de los tiempos y da para un buen extenso artículo.

Un Ritual Drone con trazas industriales que coquetea por terrenos de Funeral Doom Jazz es una etiqueta que sólo roza levemente la costra apelmazada y claustrofóbica que exuda Serpentine Sorcery. Quizás una descripción más acertada pasaría por transcribir a lo sonoro la impresión que uno tiene cuando se enfrenta a los poliédricos mosaicos rusos bizantinos. Profusión de detalles / piezas que conforman una individualidad que eleva el espíritu o volviendo a retorcernos, algo así como Oren Ambarchi, LIKE DRONE RAZORS THROUGH FLESH SPHERE y SunnO))) mezclados con The Mount Fuji Doomjazz Corporation en versión litúrgica de claves monásticas con letras sacadas de historias folklóricas (ocultismo, brujería y vampirismo, imagino que del acervo búlgaro) compiladas por Petr Tsv. Lyubenov en Sofía (1896).

Haiku Funeral en conjunción con Horthodox son aquí Dimitar Dimirov (voces), William Kopecky (bajo freetless), Alexander Timofeev (saxofón) y Anatoly Horth (sintetizador y ruidos). El resto de datos técnicos (grabación, masterización...) los desconozco salvo el artwork que es de Horth, así que vamos a adentrarnos directamente en el disco. Hay datos que se me escapan porque el corte que abre, "Wood Nymphs Milking The White Moon", es realmente el único sobre el que he visto explícitamente que sea `colaboración como tal´ entre ambos proyectos mientras que en los cinco restantes no se especifica. Una línea de saxo decadente y asordinada se abre paso como una cuchilla entre una maraña de Dark Ambient de corte muy ritual e hipnótico. 

Mántrico y profundamente litúrgico, el saxo infunde una solemnidad decrépita que se acentúa cuando entran las voces recitadas por Dimirov. Va subiendo la intensidad, el saxo se agudiza y la sensación de invocación se masca en un ecosistema sonoro de ambiente inmersivo y minimalista (sobre todo las espaciadas percusiones tipo bodhran que dan ese toque marcial característico), que usando de forma sapiencial el Noise se mezcla con esa pátina alquitranada del Black Metal industrial francés. Sigue "The Mother And The Whore Bride", ultra triposo tema con un loop basado en el eterno rozar de la aguja sobre un tocadiscos añoso y un saxo que parece que está tocando sus notas en el filo mismo donde acaba el Planeta Tierra y se asoma el resto del Cosmos. El eco se convierte en un aura tangible que abraza a la voz radiada y, llamadme loco pero parece una versión de Rendez Vous (os invito a que busquéis la historia del saxo en ese disco) de Jean Michel Jarre. El clímax va creciendo y aparecen más elementos como voces casi guturales y detalles propios del Dark Ambient pero el verdadero protagonista es el inmenso solo de saxo que se marca Alexander Timofeev que recuerda a los Bohren & Der Club of Gore, The Lovecraft Sextet y muchos más dentro del submundo del DoomJazz. 

Lenta pero inexorablemente surge la onda tipo Crucial Blast (Gnaw Their Tongues, Wolvserpent, Ramleh, T.O.M.B.) y el Black Industrial (más lo segundo) se expande como la fiesta de graduación de tuercas y tornillos electrificados en una ciclópea ferretería. Olvidados ZARAZA o THE NULLL COLLECTIVE, entra la bastarda y teratogénica "The Hate Venom", que si bien no llega al Harsh Noise sí se mete casi en el Power Electronics en algunos momentos. Muy curioso y original cómo quedan estos elementos cuando los mezclas con la calidez de un saxo en modo espiritual y cuasi Free. Es muy complejo distinguir a veces todos los instrumentos porque me consta que por ejemplo además de lo acreditado, Haiku Funeral usan cosas como theremin, e-bow, spring-drum, harpas. Bien, puedo entender que no son instrumentos metaleros al uso, pero escuchando la solemnidad de "Son of the True Snake" no puedo evitar meterlos dentro del saco de bandas de Doom Avantgarde. Una voz de ultratumba que me recuerda a los primeros AARNI, un tempo aletargado como si la rotación de la tierra se hubiera detenido, y un saxofón que suena lejano al más puro estilo de Coltrane cuando ya estaba casi que en fase terminal (Stellar Regions, Interstellar Space...). Diez minutos que van tiñendo la claridad de tu líquido cefalorraquídeo en una fosa séptica humoral. Apabullante el uso de las voces también

La homónima "Serpentine Sorcery" tira del lado más alucinógeno con notas de viento más cortas y trasfondo de ruidos difíciles de identificar; sobre el minuto 3 y pico entran percusiones y todo adquiere una curiosa pátina trip hopera en la que el saxo (no sé si está procesado) alterna entre partes que parecen vocalizaciones y otras que son breves notas autolimitadas. El tramo final es pura incursión en el ruidismo del Black Industrial de bandas como los holandeses Nihill

Cierra el disco un destilado de todo lo anterior en clave mediúmnica y onírica. Un descenso a la irrealidad de mano de unos músicos en estado de gracia. "VAMPYRIC MANTRA" como colofón y dádiva a casi una hora de purificación iniciática. SOBERBIO Y MUY RECOMENDADO.

https://www.aestheticdeath.com/releases.php?mode=singleitem&albumid=6248

https://haikufuneral.bandcamp.com/album/serpentine-sorcery


jueves, 12 de diciembre de 2024

PALE PREACHER - "AS WE LAY DYING / DEAD DAMNED THING" (CLIFFORD RECORDS CFR-117DG; 2024)




"Sepultadme con mis padres en la cueva que está en el campo de Efrón el heteo, en la cueva que está en el campo de Macpela, al oriente de Mamre en la tierra de Canaán, la cual compró Abraham con el mismo campo de Efrón el heteo, para heredad de sepultura. Allí sepultaron a Abraham y a Sara su mujer; allí sepultaron a Isaac y a Rebeca su mujer; allí también sepulté yo a Lea. La compra del campo y de la cueva que está en él, fue de los hijos de Het. Y cuando acabó Jacob de dar mandamientos a sus hijos, encogió sus pies en la cama, y expiró, y fue reunido con sus padres."

LIBRO DEL GÉNESIS, Muerte y sepelio de Jacob.

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"He visto la vida en este planeta, Scully, y precisamente por eso estoy buscando en otro sitio."

Mulder, EXPEDIENTE X

Las dos primeras entregas en esto que es la Saga Necro Apologética y Anti Epifánica del insigne proyecto PALE PREACHER comenzó con Sadness Makes Me Unkind (2021) y Hanged, Drawn, Quartered.... and Forgotten (2022) y como soy persona de costumbres tan rígidas como las rodillas del último de mis ancestros, pues no voy a cambiar un ápice y sigo donde lo dejé, así que si quieres saber a dónde vamos, arriba pincha en los enlaces y sabrás de dónde venimos. 

Así que venga, agarradme los huevos que despegamos....

VIII. NI UN CHISTE MALO HARÁ REÍR A UN CROONER MALO.

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"I dreamed about dead kisses
in the mud of sidewalks
I dreamed about the end of love
I dreamed that we died alone"

F.J. Galacho retuerce todavía más a PALE PREACHER hasta el punto de que la atmósfera se hace tan física como un ectoplasma de gazpacho en nuevo álbum mas Ep / Addendum (dependiendo de la educación que cada uno haya tenido en la vida) en la que su submundo de destilados alcohólicos ilegales en Atávicos Bosques que pueden recordarte tanto a Oregón, Maine o Los Montes de Málaga. En total 56 minutos metidos en un precioso digipack bivalente que puedes empezar por la derecha o por la izquierda, toda una deferencia a oyentes japoneses, de cuyo artwork se encarga Manolo Luque sobre pinturas con cierto toquecito Current 93 (yo sé lo que me digo) de Ángela Galacho (As We Lay Dying) Paco de Goya (Dead Damned Thing).

Y bueno, antes de meterme en faena pues sí, siguen por ahí los fantasmas de PentangleFairport ConventionMarc BolanLeonard CohenPatti Smith, toques Neofolk a lo tipos con acústicas que hablan de lo caliente que está el apocalipsis y el eterno devate de si una svástika es pa la derecha, pa la izquierda o incluso puede ser un shuriken (David Tibet), PJ Harvey16 HorsepowerWoovenhandMicah P HinsonNick CaveTom Waits y blues, mucho blues como el homiliesco Gary DavisElmore JamesHank Williams o Willie Dixon. Para colmo, pues se usa la harmónica... ya sabéis, ese instrumento que por alguna razón la gente se lleva a las cárceles para pasar el rato en una cadena perpetua o a Vietnam para espantar a los mosquitos de los arrozales. El resto de las medallas pues son para los Holler's Analog Studios y su regente Máximo RB que vuelve a darle ese toque de insania ácima justa para no tener claro si estoy atravesando el túnel de ida o de vuelta (casi que diría que de vuelta da más miedo).


Pues bien, THE SHEPHERS, teratogénicos músicos que acompañan a Galacho (voz, guitarra, piano, órgano...), son aquí:

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THE S H E P H E R D S:

Victoria Villa: coros y voces.
Juan Lillo: batería.
Máximo RB: harmonica en "Take Me To My Land".
Frank Mora: bajo y contrabajo.
Máximo Fernández: guitarra en "(I Love You) Above Any Justice Or God"

José Ojeda: cuerdas en "I Dreamed A Week Last Night", "Like Alfredo García's Head" and "(I Love You) Above Any Justice Or God".
Nahum Canoura: violin en "Burnt Lime" and "Honky Tonk Man".

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IX. COSAS QUE ES MEJOR NO HACER NI EN DENVER NI EN NINGÚN SITIO.

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"I got the power to rot everything
yes, with no evil and no
no anger and no hate
it's painful and unfair
to be wrong till death
so hopeless and strange"

As We Lay Dying son 9 cortes literales porque la verdad es que la música de Pale Preacher hiere y hace sangre en cuerpo y espíritu. Abre "I Dreamed A Week Last Night" con sus surrealistas, órficas letras y esa guitarra que te mece mientras el teatro de la tragedia se va desarrollando en la retaguardia con toda esa cortina de instrumentos de cuerda. Se erige la voz de Galacho como la del Crooner Doliente que se engalana y perfuma de putrefacto almizcle. Fabuloso la subida de intensidad y el parón donde resalta el órgano apareándose con las cuerdas en una bellísima cópula etílica. Hay muchos detalles y esto se me haría demasiado extenso pero esas afinaciones de la guitarra, esa forma de cortar la carne de la Slide y el eco expectral del sonido siempre me trae a la mente a cómo sonaría una melodía Hawaiana en una Hiroshima Post Nuclear... dicho de otra manera, es como si el tiempo, timbre y tono aquí hubieran quedado alterados en un bucle oleoso. Justo cuando iba a tomarme el antidepresivo, la crepuscular "Burnt Lime" con su base rítmica Boogie Bluesera, su línea de violín y sus fabulosos coros folky-sectarios a cargo de Victoria Villa me traen de vuelta de entre los muertos y decido que a partir de ahora me bañaré con jabón de lagarto en una barrica de roble.


La homónima "As We Lay Dying" es un fantástico himno que voy a pedir permiso a Galacho para que suene en mis exequias. Una nana fúnebre que retoma la atmósfera con la que se abría el disco, con un cierto deje a Javier Colis, y que me tiene con los vellos de punta para cuando llega a esa parte de `oh, you said, it's so blessed good to feel your flames inside once again / oh, i say, we will burn together in the deepest part of hell´"Saint Leningrad" es Folk Rock teñido de opiáceos y sustentado por la inmensa voz de Galacho que, subrayada en la retaguardia por Victoria, vuelve a dar una muestra de la inmensa creatividad de un proyecto a priori tan arriesgado como el Country (con o sin la palabra Alternativo por delante). Con su órgano y su intensidad redentora a lo Nick Cave es imposible apartar esta catarsis del Gospel y del cancionero litúrgico americano. Sublime.

Bajo, batería y cuerdas de José Ojeda emulsionan en un mesiánico himno oceánico en "Like Alfredo Garcia´s Head", junto con su piano y su órgano ululando como chotacabras en celo. No lo he comentado, pero el trabajo a las letras es sencillamente espectacular, remitiendo a la melancolía de CohenWalker, WaitsHinson y otras alegres / sencillas almas. Hay un momento en el tema más o menos a la mitad en la que guitarra, órgano, piano, cuerdas, base rítmica y yo que sé más se montan una mini-suite que podría haberse alargado hasta el infinito... descomunal y casi que sin tiempo para respirar estoy a punto de silbar la melodía de Le Llamaban Trinidad sobre la oscura y desértica "Take Me to My Land", a caballo entre el Apocalyptic Folk y el Country con letras pesimistas... joder, así da gusto de que te peguen un tiro. 


Algo de Micah P. Hinson y de una versión menos hilarante (quizás capada químicamente) de David Eugene Edwards se me viene a la cabeza en música comunidad "(I Love You) Above Any Justice Or God" que acaba tejiendo una escalera al cielo sobre peldaños con la cara de Leonard Cohen (cada peldaño con la misma cara, que ya sabéis que no era muy dado a las gesticulaciones gratuitas). Me encanta como se entrelazan las voces de Galacho y Victoria, la elegancia de Ojeda a las cuerdas, la flamígera guitarra de Máximo Fernández y ese binomio metronómico de Lillo / Mora. Cierra el cristianismo sarcástico nihilista (no sé si esto es posible, pero lo suelto) de "Call Me Ishmael" (`as being tortured and slain / screaming once again / no one will ever call me Ishmael´) y la sui generis versión del "Honky Tonk Man" en clave mitad lisergia, mitad sinfónica, que me niego a describir.


X. VOY, LE CANTO Y LE MATO, Y VUELVO.

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"The sooner the better, babe" 
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"El caballo de hierro cruza ahora sin miedo
desiertos abrasados de silencio.
Deseo de ser piel roja.
Sitting Bull ha muerto y no hay tambores
para hacerlo volver desde el reino de las sombras..."

LEOPOLDO M PANERO

Me encanta la palabra ADDENDUM. Significa (viene del latín, como casi que todo) algo así como `suplemento´ o `añadido´. Para explicarlo mejor, viene a ser como cuando eyaculas y estás ya super duchado y perfecto y asoma un addendum restante que te mancha los calzoncillos porque se ve que venía detrás a un ritmo más tranquilo. Pues algo así es Dead Damned Thing, cuatro canciones más que se agregan, tres de ellas versiones intimistas grabadas en el mismo local de ensayo supongo, y la que abre que se graba en Holler's Analog Studios. En cualquier caso, todo lo tapiza (versión ruda para rednecks de masterizar) Don Máximo Ruiz. Y sí, esta portada es la de Paco Goya.

"Dishonest Blues", que evidentemente es un Blues, tiene una estructura curiosa.... por un lado, está plagada de percusiones como si se tratara de una versión tranquila y homeopática (igualmente broncínea y acerada) de Neofolk marcial y luego, cosas de mi cerebro, juraría que la melodía es hija bastarda aunque más letárgicas del Use Your Illusion II de Gun´s n Roses. Vale, es algo loco... pero coged "Shotgun Blues""Locomotive" y "Get in the Ring" y llevad sus estribillos (y dato importante, la palabra `Baby´ está ahí por medio) a que vivan en una Comuna Hamish durante una década. Ah, y la harmónica. La puta harmónica. A "Little Red Rooster" de Willie Dixon se la abriga de órgano, piano y mucho sentimiento a la guitarra (ese mágico momento donde slide, wah wah y fuzz discuten por ver quién es el protagonista) y se beneficia muchísimo del toque crudo con el que se imprima a todo este `addendum´. Por cierto que hablando de Slide guitar, es Máximo Ruiz el encargado de tocarla en la versión de la  circense "Death Dont Have No Mercy" (tradicional) y poco, poquito he hablado de lo trascendental que resulta el piano en Pale Preacher.

Como el vómito en la encimera de roble de una pub irlandés, recogemos con espátula la saliva que se desprende de las letras de Tom T. Hall en "I Like Beer" y su finiquito "Thanks" de Spencer P. Jones y juro, juro por mis ancestros que no he consumido ninguna de las sustancias que se mencionan y espero que la heroína de este cuento se encuentre a salvo.




miércoles, 4 de diciembre de 2024

ATARAXIE - "LE DÉCLIN" (ARDUA MUSIC ARDUA027CD; 2024)

Declive / Del lat. declīvis.

decadencia, decaimiento, mengua, ocaso, debilitamiento, descenso.

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Demócrito, Epicuro y estoicos establecieron que la Ataraxia es la vía iniciátiva para alcanzar la felicidad a través de una suerte de vía del no apego; vía en la que entra en escena el indispensable elemento del miedo que entronca con el sufrimiento, angustia y decadencia que precisamente son los elementos que los dioses franceses (Rouen) ATARAXIE manejan a la perfección desde hace la friolera de casi 25 años, y veinte desde el icónico Slow Trascending Agony. Pues bien, tengo el inmenso honor y placer de reseñar su nuevo (sexto) álbum Le Déclin que edita en toda su decrépita gloria ARDUA MUSIC en una edición tan cuidada que invita a bajarse los calzones.

Cuidado hasta el más mínimo detalle, baste decir que ya sea que elijas la edición en Cd, la Cassette o el Vinilo, lo que puedo asegurarte es que vas a tener 3 ediciones que tienen sus respectivos másters y cambios y que suenan considerablemente distintas. Si a ello añades la potencia descomunal de una banda que desde su anterior, el doble Resignès (Weird Truth, 2019), rozaban el Olimpo con su triple línea de guitarras (es difícil realmente describir el muro sónico que implica esto en los franceses), no me queda más que pelarme con una navaja roma oxidada la red neuronal que recubre el interior de mi espina dorsal y hacerme una jodida infusión con ella. Actualmente, la formación se compone de Fred (guitarras), Hugo (guitarras), Jonathan (voces y bajo), Julien (guitarras) y Pierre (batería). 

En el apartado técnico voy a simplificar porque se ha grabado en diversios sitios y si queréis no tenéis nada más que hacer un click en su bandcamp y obtener los datos, pero sí que quiero hacer referencia al gélido, permafrosmático (no existe la palabra, pero me la suda) artwork de Arnaud Daval y al bestial uso del blanco y negro de Alexandra (Studio Splendor Solis) en lo que se refiere al diseño. Además, pues esa masterización en probeta alquímica de Collin Jordan (The Boiler Room). Termino los datos haciendo hincapié en el tacto poroso (un acierto) tanto del doble Vinilo como del Cd, el marmóleo acabado en blanco de la edición en color (yo tengo la negra, y si fuera rico tendría también la blanca) y la atractiva versión en cassette (coeditada con los japoneses Weird Truth).

¿Tocan Ataraxie Funeral Doom? Yo que sé. A mí las etiquetas ya me sobran cuando algo me cala tan hondo. Citar a referencias como primeros My Dying Bride, Disembowelment, Evoken, Winter, Coffins, Cathedral y demás está muy bien, pero yo que sigo el Doom extremo (me gusta llamarlo así al igual que la ola de terror extremo francesa) os puedo asegurar que su sonido es personal e intransferible. Al igual que su extensión natural Funeralium, hay cierto coqueteo agónico (en algunos rangos de voces) con los alegres y dicharacheros Bethlehem o cierta manera de mecer las melodías a lo Forgotten Tomb (versión Doom). Quedes con lo que te quedes, los 80 minutos de esta OBRA MAESTRA no los vas a olvidar fácilmente. Abre el disco la homónima "Le Déclin", a la postre la más corta con 16 minutos. Unas mistéricas notas de guitarra ultra melancólicas estallan como una sepsis sonora incontrolable a la vez que entra una procesionaria base rítmica lenta que se acompaña de un recitado en francés que van desgranando unas letras que harían eyacular a Cioran y un hipnótico trenzado de guitarras que se repiten como un loop. A este nivel suenan a Evoken en Quietus. No es nihilismo, es estar justo al borde de la miseria. 

Minuto 5 y se llergue un poderoso pasaje al más puro estilo Death / Doom noventero con voces guturales, cavernosas y exhumadas de más allá del estómago (diríamos el intestino grueso). Discernibles hasta ahora y nada crípticos, Ataraxie son Dioses de lo suyo aquí, un Funeral Doom que podría recordar a Profetus o los primeros discos de los germanos Ophis pero claro, los franceses estaban antes. Conforme avanza el tema, la sensación `de caída´ existencial se acentúa en una acritud sonora que te rasga el interior a base de una base rítmica que se sincroniza a la perfección con la guitarra como banda ultra engrasada que son. 

Sigue la monolítica "Vomisseurs De Vide", muy dinámica y más elaborada musicalmente; sobre un fondo de guitarra distorsionada otra va punteando con ese tono lúgubre que tenían tanto Disembowelment como Evoken (no cito a Skepticism porque los fineses tienen la particularidad de parecer que su música llega desde el fondo oceánico de un mar de aceite). Excelentes las bajadas de intensidad en las que se queda una guitarra (muy trabajadas las composiciones, con ese regusto circular que tanto me gusta y una cierta atonalidad en los desarrollos melódicos) y los platillos como campanas tocando por difuntos. Quizás voy a decir una absoluta payasada pero cuando la voz limpia recita, quitando el tono histriónico, me trae a la cabeza a los injustamente olvidados Eros Necropsique.

Ataraxie manejan a la perfección la intensidad (no me gusta citar bandas más recientes, pero un poco es a lo Spectral Voice o primeros Blood Incantation) con un incursiones en pasajes enclavados directamente en el Old School Death tipo Incantation. Lejos de parecer que la cosa va a decaer, entramos en terrenos Black Doom con unos blast beats y guitarras afiladas que te dejan exangüe pero claro, los contrastes definen a los franceses y al segundo bajamos a tempos del inframundo. Casi sin darte respiro, "Glory of Ignominy" abre con cánones más estándares que pueden recordarte a los My Dying Bride y cositas de los Mournful Congregation y es que por alguna razón Ataraxie mantienen la fuerza / crudeza de sus dos álbumes anteriores pero el enfoque es mucho más digamos `tradicional´ en el sentido estilístico del término salvo ese clímax in crescendo de puro y duro Death Metal que en directo tiene que ser una apisonadora. Mención especial para esos gritos agónicos que suenan en la retaguardia y las letras que invitan a todo menos al optimismo. Además me gustaría también apostillar que aunque no entran en terrenos Sludge, sí que tiene cierta vértebra de la suciedad de bandas como Eibon o los americanos Aldebaran... no sé si es porque la crudeza es tan alta que acaba uno imbuyéndose de la lisergia inmanente a esos estilos.

Le Déclin es un álbum exigente e incluso quizás excesivo de una tacada, pero que necesariamente precisa de muchas escuchas para sacarle todo el jugo que guarda... ese Soma que altera la conciencia y te saca de la línea temporal tradicional. El último clavo en el ataúd lo pone "The Collapse", algo así como `La Canción del Verano para Gente Muerta´. Ni un resquicio por el que respirar en un descenso a lo Worship, Loss pero con la fiereza del plúmbeo Death noventero. Podría seguir escribiendo sobre el disco, pero los niveles de Serotonina me están bajando hasta el punto de que llevo 20 minutos fijándome en una cuchilla roma que tengo aquí al lado.

OBRA MAESTRA.

https://arduamusic.bandcamp.com/album/le-d-clin

https://ataraxie.bandcamp.com/

SOON :: MUSIC FOR FIREWALKERS /////// BLIND RULER CURSED LAND

Quien siga este blog sabe de mi idilio con las bandas Checas y el Avantgarde desde aquella ya lejana eclosión de grupos como Plastic People of the Universe, DG307, Pulnoc y un sinfín más. Para mí, se trata de una Segunda Ola de Avantgarde Checo o al menos así lo vivo en mi mente desde que entré en contacto con Willhelm Grasslich, fundador de la Pravěk Noise Section  y artista tras los impresionantes proyectos en grupo UNCLE GRASHA´S FLYING CIRCUS (Split con Calf / Split con Kostadis / Stalinist God / OST)  o Surfin' Bazooka y en solitario con el impresionante BLIND RULER CURSED LAND, del que os traeré en breve su ALUCINANTE nuevo Music for Firewalkers que se edita en formato de coedición junto a los sellos Sky Burial, Radek Buldra, Gladivs Records e In Illo Tempore

Mayestático Neofolk, esoterismo Marcial, Dark Ambient letárgico, Blind Ruler Cursed Land nace en 2020 y desde entonces os he traído las reseñas de Chrysantheme Delirium o el split junto a Arabian Family Payback. Así pues, en breve, reseña de Music for Firewalkers, su más ambicioso trabajo hasta la fecha. STAY TUNED!!!!!!:



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